lunes, 28 de noviembre de 2011

A estas alturas

A estas alturas, tendría que haber muchísimas entradas, pero mi falta de ganas y de inspiración ha hecho que en lugar de ello, solo hayan momentos vacíos, aunque en parte lo entiendo, pues últimamente me siento tan inútil que tengo poco que aportar a este blog... "son cosas que pasan" diría mi ex novia, y sinceramente he de darle la razón, son cosas que pasan, pero la cuestión es preguntarse el porque pasan así.

Hoy por hoy intento buscar la inspiración, y a pesar de que muchas veces la encuentro justo enfrente de mis narices, creo que no es solo inspiración lo que me falta, pero es una de tantas cosas que he dejado caer por el camino. Me doy cuenta de que en la actualidad he perdido la confianza en mi mismo, y aunque no me faltan las ganas de cambiar, si que me faltan las ganas de comenzar a actuar, mi iniciativa se seca y mi alma se vacía.

Desde hace un tiempo me planteo mi necesidad de tomarme un tiempo para mí, pero en estos años de crisis, mi crisis de identidad no es comparable con la crisis económica y todos los recursos que conlleva perder un año. Esto me hace sentir idiota y asfixiado, noto que tengo ansiedad y mi estado de animo sube y baja al azar en forma de zig-zag y sinceramente creo que pierdo más tiempo en este estado de indecisión del que me perdería dándome un año de reflexión... No sé, son decisiones fáciles con consecuencias difíciles, y quizá lo más difícil es intentar explicar el como me siento a aquellas personas que se preocupan por mí y mi futuro, esas personas que no conseguirían comprender que necesite "perder" el tiempo para más tarde avanzar con más fuerza... Eso pensarían, que voy a perder el tiempo. No es sencillo tener contentos a los demás cuando uno no es feliz, y menos sencillo es sentir que arrastro a los demás cuando lo único que intento es no ser arrastrado por lo que no quiero ser.

Me siguen gustando las mismas cosas, sigo adorando el cine, la radio y por supuesto el teatro, sigo alucinando conmigo cada rapeo que hago, con cada ensayo que escribo y con cada obra que comienzo a escribir, cada vez tengo más claro el como quiero que sea mi vida, voy amueblando mis sueños en mi cabeza y aprendo a ser modesto y consecuente con lo que espero de mi futuro. Ya no espero una casa con un coche en la puerta, tener una mujer maravillosa un perro enorme y unos hijos bien educados, eso es algo precioso, pero no para este momento de mi vida.

Tengo 20 años y he decidido que soy un desastre, no por gusto sino por indecisión, me siento forzado a vivir una vida que no me corresponde, creo que desde hace un año solo hago que tomar decisiones equivocadas, desde el mes de enero, me siento en la cuerda floja, no quiero caer, pero por no caer al vacío no hago mas que desprenderme de cosas para compensar el equilibrio, no soy capaz de encontrarme, lo cual hace que no consiga encontrar sentido a la gran mayoría de las cosas que hago. Necesito una transformación, un cambio de aires, necesito tiempo para volver a ser quien soy y recuperar mi identidad, o quizá necesite tiempo para construir mi nueva identidad, causada por los fuerte cambios a los cuales me he estado enfrentado. Mi lucha contra la depresión, me ha hecho dar palos de ciego haciendome caer en la duda de que es lo que me deparará el destino y si realmente lo que quiero es eso. Pero como puedo estar seguro de algo si lo único que soy capaz es de tomar decisiones a ciegas con el único objetivo de no sufrir... Realmente no puedo ser objetivo cuando se trata de mi propia vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario